miércoles, 30 de abril de 2008

Sabor A Poco


Boca lo tenía Knock Out al Cruzeiro hasta el gol de Dátolo, pero otra vez como en el partido contra Maracaibo se quedó, le faltaron piernas, aire, tranquilidad mental para poder liquidar una historia que durante 70 minutos fue toda Azul y Oro.
El conjunto Brasileño con muy poco, casi sin llegar al arco, aprovechó el quedo por parte del local y se llevó un gol que puede ser vital para este cruce, ya que con un tanto en Brasil los Cariocas se clasifican a cuartos de final.

En los primeros 10 minutos el conjunto de Ischia fue una aplanadora que le creó tres situaciones claras de gol, y antes del cuarto de hora ya estaba en ventaja. Un centro desde la derecha para un Riquelme que solo en el área definía de derecha cruzado. Partido 1 – 0 y se intuía que podía haber una goleada porque Boca era una tromba y Cruzeiro mostraba flaquezas por todos lados.
Siguió yendo de manera constante por derecha el local con González y hacía estragos por esa zona. Pero al “Xeneize” le faltó serenidad para definir, certeza a la hora de meterla en el arco y por eso se fue 1-0 al descanso, diferencia que por todo lo que había generado parecía efímera.

En la segunda mitad no varió demasiado el trámite del encuentro. Los dirigidos por el “Pelado” buscaban una y otra vez el arco rival, y estaban más cerca del segundo que los brasileños del empate. Palermo en los primeros 5 tenía dos claritas y fallaba. Recién a los 7 se vio un ataque con riesgo de la visita tras un tiro de Wagner que se fue cerquita del palo.
Estaba al caer, había olor a gol y llegó. Otra vez Jesús Dátolo como en el encuentro pasado de Copa armó una gran jugada, pero esta vez definió de derecha para dejar sin chances al arquero.
En el mejor momento, cuando lo tenía contra las cuerdas, cuando estaba para darle el último golpe así el rival besaba la lona, se durmió, se quedó sin piernas. Fue ahí cuando el visitante sin proponer demasiado comenzó a adelantarse en el campo, a darse cuenta que siendo tibio y todo podía llegar al descuento.
A los 32 minutos, Fabricio tiró desde una posición casi inusual, el remate dio en Álvaro González y dejó a Caranta mal parado; cotejo 2-1 y lo que podía ser una goleada terminó siendo casi un triunfo para los ”Garotos”.

En el final hubo una agresión al línea y muchas son las versiones que se corren. Lo real es que puede haber sanción para Boca, pero no iría más allá de una multa o la suspensión de su cancha. El partido quedará con ese resultado que dejó varias caras largas en la Bombonera.
Rotación nada, cansancio mucho, esa fue una de las claves por las cuales se pinchó en el final y quedó con las manos casi vacías.
A esperar la revancha, los de Azul y Oro saben jugar con presión y mas en Brasil donde han ganado todo.

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