lunes, 16 de junio de 2008

“Toros”


Los Andes le ganó 1-0 como visitante a Italiano y ahora, jugará la promoción frente a Nueva Chicago por un lugar en el Nacional “B”. Se lo planteó bárbaro Della Picca y consiguió el “Milrayitas” el triunfo mas importante de los últimos años.

Viste como son los goleadores como dice un relator, no aparecen pero cuando aparecen te la mandan a guardar. Así fue como Alberto Yaqué, que venía en sequia, clavó el único tanto del encuentro. El ídolo de la gente, ese que jugó infiltrado, que se banca todos los golpes ahí arriba fue la clave para ganarle a un equipo de “Cachín” Blanco que pregona un futbol vistoso, pero poco efectivo para estas instancias.
Lo ganó porque no especuló y lo fue a buscar, a diferencia del local que cuando salió a atacar porque estaba en desventaja, se topó con la figura de Luciano Díaz que sacó algunas pelotas claves. De un arco al otro Lomas está en promoción porque uno la mete, y el otro las saca.

En el primer tiempo se planteó lo que sería el cotejo hasta el gol. Un Italiano esperando agazapado para salir de contra y un Los Andes al cual no le caía una idea y por ello, escaseaba en chances de gol. Solo a partir de yerros del rival, tanto uno como el otro, pudieron estar cerca de los arcos.
Yaqué ya avisaba a los 18 de la primera mitad tras un pase de Tridente, pero en esa ocasión se topó con Anconetani que le sacó el gol.
El “Milrayitas” trataba de acercarse cada vez mas, pero no tenía en sus creadores de juego ese cambio de ritmo que provocara un aumento en la calidad de juego.

En el segundo tiempo Della Picca al que tanto le cuestionaron sus cambios defensivos volvió a entender el partido y mandó a la cancha a Avalos por Maxi Acosta. Tres delanteros y a ir con todo a buscar la victoria que era lo único que servía.
De tanto ir, de tanto apretar llegó el tan ansiado gol, ese que le da la posibilidad de soñar con el ascenso. A los 20, Tridente sacó un remate que se estampó contra el palo y el “Beto”, como buen pescador, estaba en el área chica para guapearla y empujarla.
Partido 1-0 y ahora si, a su juego lo llamaron. Los Andes se replegó, aguantó la diferencia y tuvo en Luciano Díaz el sostén para el triunfo merecido. Algunas tapadas importantes del arquero fueron vitales para que el marcador se mantenga de esa manera.

Tras el pitazo final delirio en Ezeiza, Lomas y todos los rincones donde haya una camiseta Roja y Blanca. Mil razones tiene el hincha para festejar porque el equipo fue guapo, lo jugó como se tiene que jugar estas finales y lo ganó.
El Toro fue Los Andes que llega al sábado quizás mas desgastado, pero con toda la motivación y las ganas de hacer historia, de volver a la Primera “B” Nacional.

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