Al final llegó, fue de la partida tras la lesión impactante de la primera final del reducido ante Italiano. Jugo 72 minutos y fue parte en la jugada del gol del Beto Yaqué. Era suyo, pero el palo se lo negó y el su compañero de ataque la embocó. Tras el partido, un Tridente que siente que son sus últimos partidos con la camiseta de Los Andes expresó sus sensaciones con una sonrisa que no se le borró en toda la nota
-Llegaste justo, creo que ni loco te querías perder este partido, ¿no?
- Uno rogaba jugar este partido, le pedía a Dios para que no sea desgarro. Por suerte no fue, pude jugar, no 10 puntos físicamente pero no importaba porque quería si o si llegar. Por suerte estuve en la jugada previa al gol del Beto donde pegó en el palo, hubiese sido lindo si era mio aunque no importa quien lo haga lo mas hermoso es que podamos estar aca.
Creo que fuimos justos ganadores porque lo buscamos constantemente.
Ahora vamos por mas, estamos bien y todos unidos.
-¿Como viviste en lo previo este partido importante?
- La previa a este partido era una tensión bárbara. Se juega mucho, hay respeto, tenés que correr, meter, trabar ir siempre a todas las pelotas a full. Estos encuentros son finales y hay que jugarlos como tal. Uno lo vive a full ya desde la concentración a la noche, luego en el micro para la cancha. Por suerte somos nosotros los que disfrutamos al final y bien merecido lo tenemos.
-A Chicago le alcanza con dos empates, ¿otra vez Los Andes tendrá que hacer el gasto?
- Chicago tiene la ventaja deportiva, como la tuvo también Italiano ya que si empatábamos pasaban ellos. Hay que ir a jugar, hay que ir ganar donde sea, no desesperarse ir tranquilos a jugar los partidos. Jugando como hoy se puede llegar al Nacional porque cuando se tuvo me meter se metió y luego se golpeó cuando fue necesario.
-La gente de Los Andes esta más que ilusionada. ¿Que mensaje le das?
- La gente tiene derecho a festejar porque sufrió mucho y siempre estuvo en las malas con nosotros. Ahora a festejar hasta el sábado de manera corta para luego pensar en las dos finales que quedan y a jugarlas como tal y matarse para ascender.
-Llegaste justo, creo que ni loco te querías perder este partido, ¿no?
- Uno rogaba jugar este partido, le pedía a Dios para que no sea desgarro. Por suerte no fue, pude jugar, no 10 puntos físicamente pero no importaba porque quería si o si llegar. Por suerte estuve en la jugada previa al gol del Beto donde pegó en el palo, hubiese sido lindo si era mio aunque no importa quien lo haga lo mas hermoso es que podamos estar aca.
Creo que fuimos justos ganadores porque lo buscamos constantemente.
Ahora vamos por mas, estamos bien y todos unidos.
-¿Como viviste en lo previo este partido importante?
- La previa a este partido era una tensión bárbara. Se juega mucho, hay respeto, tenés que correr, meter, trabar ir siempre a todas las pelotas a full. Estos encuentros son finales y hay que jugarlos como tal. Uno lo vive a full ya desde la concentración a la noche, luego en el micro para la cancha. Por suerte somos nosotros los que disfrutamos al final y bien merecido lo tenemos.
-A Chicago le alcanza con dos empates, ¿otra vez Los Andes tendrá que hacer el gasto?
- Chicago tiene la ventaja deportiva, como la tuvo también Italiano ya que si empatábamos pasaban ellos. Hay que ir a jugar, hay que ir ganar donde sea, no desesperarse ir tranquilos a jugar los partidos. Jugando como hoy se puede llegar al Nacional porque cuando se tuvo me meter se metió y luego se golpeó cuando fue necesario.
-La gente de Los Andes esta más que ilusionada. ¿Que mensaje le das?
- La gente tiene derecho a festejar porque sufrió mucho y siempre estuvo en las malas con nosotros. Ahora a festejar hasta el sábado de manera corta para luego pensar en las dos finales que quedan y a jugarlas como tal y matarse para ascender.
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